Crónica: RAFAEL RODRÍGUEZ
Salimos del lugar habitual dieciocho compañeros en cuatro
coches en dirección Ronda, hasta la venta el Madroño donde hemos quedado
citados con los guardas de la finca. Allí se nos unen el resto de compañeros que
suben desde San Pedro, hasta un total de veinticinco.
Una vez reunidos iniciamos la marcha, dirección Ronda hasta la
desviación hacia Pujerra. Recorremos unos Km rodeados de laderas de castaños pelados
y asfalto y campo cubierto de una alfombra de hojas que dan un tono rojizo al
paisaje.
A las 10:30 h aparcamos los coches en el Puerto de los
Perales, junto a la entrada a la finca. Uno de los guardas nos hace la foto de
rigor y nos acompañan a la verja de entrada. El día está nublado y con bastante humedad. Iniciamos el
recorrido, con las instrucciones que recibimos de Antonio, el guarda más
veterano, por un carril bien conservado
que desciende suavemente.
Caminamos hasta alcanzar el camino de la Herradura, que
servía de comunicación entre Benahavís con Pujerra e Igualeja, bajo un matorral
espeso de jara pringosa, madroños y pinos que iremos viendo a lo largo del
recorrido.
Pasamos por Los Chorreros de Majal Alto. Caminamos a
buen ritmo cruzando arroyos que bajan con bastante agua por las lluvias de los
últimos días. Las vistas al valle son limitadas por la nubosidad, pero aún así,
se puede apreciar la extensión de la finca que estamos recorriendo.
Hacia las 13:30
h. llegamos al cruce de Los Juncales donde nos reagrupamos y aprovechamos para
tomar algo de alimento y reponer fuerzas, momento que algunos compañeros aprovechan
para bajar hasta la Fuente de los Alcornocales.
Iniciamos el ascenso bordeando la ladera del Cerro
de Doña Juana. Cuando llegamos al Puerto del Lobo nos esperan los guardas, que
muy amablemente, nos han ido dejando señales en los cruces que hemos encontrado
en el trayecto. Nos indican la dirección hacia nuestra próxima parada para
comer que será en la Venta Natía. La subida se hace más pronunciada lo que
ocasiona que el grupo se fraccione de nuevo. La humedad hace más llevadero el
ascenso hasta la venta, lugar que elegimos para comer.
Los últimos llegamos sobre las tres de la tarde, algunos
compañeros ya habían comido e inician la ruta de nuevo, comemos bajo una niebla
y humedad que hacían el lugar algo inhóspito. Los guardas nos indican “que no merece la pena subir al Cerro de Doña
Juana porque dadas las condiciones climatológicas no íbamos a ver nada y era
tiempo perdido…”. Nos dan las últimas instrucciones y se marchan al haber
acabado su jornada laboral.
Volvemos a la pista principal y seguimos ascendiendo
dirección norte buscando la puerta de salida. Ignacio espera a los últimos y
cierra la valla abandonando la finca. Nuevamente los guardas nos han indicado
el camino a seguir con señales en los arbustos de jara pringosa que
jalonan todo el recorrido.
Iniciamos una “subida
moderada” que por poco acaba con algunos de nosotros después de veinte km
en el cuerpo, pegados a la vaya de la finca y sin sendero definido con una
pendiente elevada y un terreno muy pedregoso y suelto.
Fueron dos km y medio muy pesados y dificultosos hasta llegar
de nuevo a la puerta de entrada, donde retomamos la pista hasta los
aparcamientos.
Los primeros en llegar ya se habían marchado por distintas
ocupaciones personales. Los últimos lo hicimos hacia las seis de la tarde.
Distribuidos en los coches que quedaban, iniciamos el regreso con parada en la
Venta del Madroño.
Unos cafés e infusiones al calor de la chimenea para comentar
las incidencias de la ruta y dar por terminada esta salida.
El grupo de 25 participantes: delante Antonio Peña, guarda de la finca. De izquierda a derecha, en primera fila: Ignacio Pérez de Vargas, María Fernández, Sofía Mateos, Loli García, Pura Ruedas, Ana Ortiz y Miguel Alonso. Segunda fila: Jan Vanwan, Chus Mariño, Pepi González, Gabriel Guerrero, María Lozano. Tercera fila: Rafael Rodríguez, Roque Jesús Gómez, Margaret O'Connor, Juan Manuel Usero, Ana Sola, Lola Criado, Laura Pérez y Ángeles Tirado. Al fondo: José Quirós, José María García de la Nava, Antonio Vallejo y Enrique Jiménez. No salen en la foto, Jorge Díaz y el guarda Juan Antonio Peña que hace la foto.
Esta finca tiene una extensión de 6.500 hectáreas que se encuentran ubicadas en terrenos de los términos municiples de Benahavís, Pujerra y Júzcar.
Trazado del recorrido que haremos por la finca "La Resinera" en 3D.
Buenas tardes a todos,
ResponderEliminarsegún tengo entendido el río Guadalmansa nace en las inmediaciones de esta finca. ¿Tenéis constancia gráfica de ello?
Un saludo.